Puno, ciudad edificada a orillas del Lago Titicaca, es un puerto lacustre que muestra paisajes de singular belleza. En sus llanuras y montañas los pobladores se dedican a la crianza de llamas y alpacas, en parajes de escasa vegetación pero de abundantes pastos naturales y también a la elaboración de artesanías y finos tejidos en lana de alpaca.